En junio del 2017 comenzamos este programa de estimulación temprana e infantil en el que llevamos a cabo una pedagogía de acompañamiento que ayuda a despertar la conciencia corporal, prestando atención a los sentidos y potenciando las habilidades y, ofreciendo así al niño la posibilidad de fortalecerse y desarrollarse. Desde entonces son más de 50 niños y niñas en situación de vulnerabilidad los que han desplegado su ALAS, ¡es lo que tiene dejarse mecer al ritmo del movimiento!